Mª Ángeles Lozano entrevista a Ricardo García, gerente de Improven en las oficinas de Madrid y Galicia, en el programa A Media Sesión de Intereconomía, quien ha explicado un análisis del sector bodeguero español. Además, ha contado cómo se ve el futuro del sector vitivinícola, matizando que dependerá de su capacidad de innovar, digitalizarse y atraer talento, garantizando así su competitividad en un entorno cada vez más exigente.
Con la combinación adecuada de tradición y modernización, las bodegas españolas pueden consolidarse como referentes en el mercado internacional.
La particularidad del sector vitivinícola
Ricardo García, gerente de Improven en Madrid y Galicia, destaca que la mayoría de las bodegas con las que trabajan son negocios familiares, aunque existen excepciones en las que participan fondos de inversión o cooperativas. Estas empresas tienen un fuerte arraigo en el producto y un gran amor por la tierra, lo que enriquece su propuesta pero también añade complejidad a su adaptación al mercado.
El sector vitivinícola se enfrenta al reto de diversificarse y adaptarse a los gustos de los nuevos consumidores. García menciona que las bodegas buscan expandirse en diferentes denominaciones de origen y mercados internacionales, lo que implica adecuaciones en la presentación de los productos. «Una misma botella puede tener el mismo caldo, pero debe adaptarse con etiquetas, cápsulas o corchos distintos según el mercado de destino», explica. Estas variaciones generan desafíos logísticos e industriales que requieren una gestión eficiente.
El papel de la digitalización
A pesar de su tradición, el sector bodeguero no puede quedarse atrás en la transformación digital. «Muchas bodegas están ubicadas en zonas rurales donde la conectividad aún es un problema», señala García. La digitalización de procesos, desde la trazabilidad del producto hasta la gestión de la producción, es fundamental para garantizar la competitividad. Improven no vende software, pero sí ayuda a estas empresas a implementar herramientas digitales que optimicen su gestión y profesionalicen sus operaciones.
Talento y formación, claves para el futuro
El acceso a talento cualificado es otro de los grandes desafíos del sector. Al estar en zonas rurales, muchas bodegas enfrentan dificultades para encontrar personal con la formación adecuada. «Es vital apostar por la formación continua para que los equipos crezcan y se adapten a los retos del sector», subraya García. La profesionalización del talento es una estrategia clave para la sostenibilidad del negocio.
Resiliencia y adaptación ante los cambios del mercado
El sector vitivinícola ha demostrado una gran capacidad de adaptación ante situaciones adversas, como los aranceles impuestos por Estados Unidos a productos europeos en el pasado. Sin embargo, la evolución del consumo de alcohol, especialmente entre los jóvenes, representa un reto importante. Para mantenerse competitivas, muchas bodegas están explorando nuevas opciones como vinos sin alcohol o productos innovadores.
La importancia de la sucesión en la empresa familiar
La gestión de la sucesión en empresas familiares es un tema crucial. «Es fundamental dejarse asesorar y establecer protocolos claros para evitar conflictos internos», recomienda García. Contar con reglas del juego bien definidas permite garantizar la continuidad del negocio sin fricciones entre familiares, facilitando el relevo generacional.
El futuro del sector bodeguero en España
El sector está viviendo un proceso de concentración, donde el tamaño y la profesionalización son claves para la competitividad. «Cuando un fondo de inversión detecta oportunidades de mejora en una bodega familiar, ve el potencial de crecimiento y apuesta por su modernización», comenta García. Este fenómeno está impulsando la transformación del sector y su consolidación en el mercado global.
¿Tu empresa pertenece al sector bodeguero en el mercado español? Veamos qué podemos hacer para impulsar tu crecimiento. ¿Empezamos?