Para, respira profundamente y cierra los ojos. Recuerda cuando tenías 10 años, ¿qué ves?, ¿qué sientes?, ¿con quién estás?, ¿quiénes son tus amigos?, ¿qué hacen tus padres?, ¿dónde estás? Insisto, párate y respira hondo. En el mundo de las empresas familiares, el concepto de Km 0 en empresas familiares se ha convertido en esencial para la transmisión de valores y el legado empresarial.
Haz lo mismo, pero ahora cuando tenías 20 años, y con 35, y con 50, y cuando tengas 80, Re insisto, párate, respira hondo y recuerda o imagina si es el caso.
Te invito ahora a que hagas el mismo ejercicio, pero situándote cuando haga 20 años que ya no vives, y si hace 100 años que dejaste de existir, y si…
Todo tu esfuerzo, toda tu energía, todo tu empeño,…. ¿para qué habrá servido?, ¿qué habrá supuesto tu paso por este mundo distinto a si no hubieras existido?, ¿qué hubiera sido diferente sin ti?, ¿cuál es el verdadero legado que has dejado?
Son preguntas que rara vez nos hacemos y, menos, desde la perspectiva de responder permanentemente a los retos que se nos presentan en el día a día para sobrevivir en este contexto tan exigente. Actuamos en muchas ocasiones desde una cierta rutina. Desde querer proteger lo que tenemos, o de querer lograr un mejor status quo para nosotros y para nuestros hijos. Quizás, son preguntas que se llegan a hacer las personas más mayores cuando ven el final de sus días. ¿Podrías irte de este mundo pensando “de verdad que valió la pena”?
El significado de Km 0 en la transmisión de valores
Nuestro mejor legado no es dejar un patrimonio económico enorme a la siguiente generación, sino unos valores, unas capacidades, unas competencias, una forma de estar y ser en el mundo que vaya con ellos hasta el final de sus días. Y sin duda, el legado económico y material ayudará a que esto sea posible. Pero no como fin en si mismo, sino como medio para ello, como consecuencia de las cosas bien hechas. La virtud de generar riqueza que permite entrar en un infinito círculo virtuoso.
Una familia empresaria impacta en gran medida en todas las personas con las que se relaciona: trabajadores, clientes, proveedores y la sociedad en su conjunto… Van más allá que una cuenta de resultados y un balance. Es una forma de ser parte de este mundo. Tienen un propósito compartido, unas relaciones fundamentadas en buenos valores, en el que cada uno puede aportar desde sus capacidades e intereses, por supuesto dentro de un marco que nos cuide pero premie la meritocracia. Enseñar a pescar por encima del dar de comer.

Y para construir este sistema de relaciones, de cultura, NO LO DUDE: EN LAS EMPRESAS HAY POLÍTICA Y, EN LAS EMPRESAS FAMILIARES, TAMBIÉN. Las bases constitucionales de la empresa familiar, se hayan escrito o no, subyacen en el día a día de la empresa, son la base sobre las que se asientan la cultura de la empresa, son los pilares de las diferentes actividades de la familia.
Estrategias para implementar el Km 0 en empresas familiares
En muy pocas ocasiones este legado se detalla, se escribe, se estructura, se transmite de manera ordenada. Responder a preguntas como ¿para qué estamos juntos?, ¿por qué somos como somos?, ¿por qué hacemos lo que hacemos?, ¿para qué lo hacemos?, ¿qué nos ha ido bien y qué nos ha ido mal?,…. es imprescindible para ir dando forma a las reglas (políticas) bajo las cuales nos vamos a regir en la familia empresaria.
El primer autosabotaje: creerse que la unión de su familia es a prueba de bombas, y que podemos dejar al azar estos aprendizajes, a la mera transmisión oral, boca oreja, o que el buen ejemplo es suficiente. Es entender que la humanidad ha prosperado sólo a través de las historias que se contaban en las hogueras de los pueblos prehistóricos. Desde el código de Hammurabi, las tablas de Moises,…. hasta los manuales de uso del último producto tecnológico del s.XXI todo tiene unas instrucciones de uso. Unas reglas de convivencia bajo las cuales nos ponemos de acuerdo para funcionar. Si las respetas creces y, si no, quedas expulsado del sistema, o no puedes usar el cachivache.
Tú que ya hace muchos años aprendiste un oficio (hacer), que se lo enseñaste a otros para que creciera el sistema (hacer hacer), que puedes estar cerca o inmerso en la fase del consabido relevo generacional (dejar hacer a otros). Siempre y cuando no has sucumbido al “lo vendo todo y me quito de problemas”, cuando sabes en el fondo que eso acarreará más problemas. Tú que piensas que ahí terminas, tengo que darte una mala noticia, te queda el último escalón para lograr el 10.
Beneficios de adoptar el enfoque Km 0
¿Cómo es realmente el enfoque de «Km 0 en empresas familiares«? Escribir el SER, escribir las políticas, escribir los acuerdos, ahora que tienes la fuerza y la credibilidad, el liderazgo en la familia. Dejar constancia por escrito, tener conversaciones con los diferentes miembros para sembrar ideas compartidas, para que lo que os ha permitido llegar a lo que sois como familia, pueda tener continuidad cuando tu no estés, que te puedas ir con la tranquilidad de “yo lo he hecho lo mejor posible y ahora ya les toca a los siguientes”.
Por qué no importará lo que hagan las siguientes generaciones, sino cómo lo hagan y para qué lo hacen. Dará igual si quieren seguir con la misma actividad que el abuelo o emprender otra nueva, o quieren ser médicos, o profesores… lo que les impregnará es una cultura, unos valores, unos principios que sin duda les generará riqueza a ellos y a su entorno. Y la gran noticia es que el resultado es exponencial. Se va multiplicando en cada eslabón de la cadena y sin duda esto impacta en muchas más dimensiones de las que somos conscientes. Entrar en el infinito círculo virtuoso.
Sin duda, ahora podrías imaginar en el ejercicio que te proponía al principio que de verdad has sembrado las semillas que harán que ese mundo que exista 20, 100 o más años cuando tu no estés, será algo mejor del que sería si tu no hubieras hecho este último esfuerzo.

El futuro del legado: cómo asegurar la continuidad de los valores
Asegúrate por tanto en estos últimos años en activo, que la familia empresaria aprende a usar estas reglas del juego, que se respetan y que se llevan al día a día, que forman un carácter, que impregnan unos valores, un propósito, y no sólo a los tuyos, sino a todos con los que te relacionas. Si cada uno hace lo mejor que sabe y puede, no tiene por qué hacer más. Impactas así de manera exponencial, sirves de inspiración y de ejemplo. Este es tu mejor legado.
Para profundizar en estrategias de legado empresarial, visita nuestra sección de empresa familiar o ¡escríbenos! ¡Estaremos encantados de atenderte y contarte más acerca del km 0 en empresas familiares!
NOTA: Este artículo está basado en el autosabotaje titulado «NO LO DUDE: EN LAS EMPRESAS HAY POLÍTICA Y, EN LAS EMPRESAS FAMILIARES, TAMBIÉN», publicado en la guía escrita por Fernando Giner, consejero asesor y miembro del consejo de Administración de Improven, Fernando Giner, que te recomendamos leer: «Autosabotajes en la sucesión de la empresa familiar»