Una marca fuerte es aquella que es reconocida y valorada por sus clientes, empleados y otros agentes de interés.
Nike. Prada. Improven… ahí te dejamos unos ejemplos.
Una marca fuerte puede ayudar a las empresas a atraer y retener clientes, a aumentar sus ventas y a mejorar su reputación.
Por eso, como consultora estratégica que ayuda a otras empresas a preparar estrategias y a cumplir sus objetivos, hemos visto de primera mano cómo una marca fuerte puede ser una ventaja competitiva clave.
La importancia de crear una marca fuerte
Poco a poco en nuestra consultoría de marketing y ventas vemos cómo las empresas están reconociendo gradualmente el valor crucial de su marca. Vemos cómo están adoptando estrategias de branding para potenciar el valor de la entidad.
¿Por qué? Muy fácil. Porque la marca es uno de los activos más significativos de una compañía. Por lo tanto, es fundamental tener una estrategia de branding para lograr el posicionamiento deseado y elevar su valor en el mercado.
Hoy en día, un creciente número de directivos entienden que deben enfocarse en estos elementos para aumentar sus probabilidades de éxito empresarial. Sin embargo, a pesar de ser conscientes de la relevancia de una estrategia de branding, la dificultad a menudo radica en cómo implementarla adecuadamente.
Cómo se crea una marca
La creación de una marca depende de diversos factores. De nociones entrelazadas. De diferentes aspectos. Pero si hay algo que destaque sobre todos los otros puntos es el aporte de valor que se ofrece. Si no se logra ofrecer valor al cliente, ya os confirmamos que es complicado que la marca pueda prosperar.
Este valor actúa como una moneda de dos lados.
- Valor para el cliente: Se refiere a que un consumidor elige una marca debido al brand equity que ésta ha desarrollado.
- Valor para la empresa: Hace alusión a cómo la marca impacta en la valoración global de la compañía, reflejándose como un activo esencial.
Si quieres desarrollar este brand equity del que hablamos, es vital que tu empresa se enfoque en los componentes esenciales de vuestra marca y cómo está interactúa con la audiencia. En un sentido y en otro, ya que también es necesario saber qué piensa el público de nosotros.
Por eso, en nuestra metodología en Improven, reconocemos un proceso interno de construcción, originado propiamente en la empresa, y uno externo, producto de la interacción de la marca con su público y basado en sus experiencias y percepciones.
En este artículo, compartiremos 10 elementos esenciales para crear una marca fuerte. Un sólido pilar sobre el que hacer orbitar el resto de departamentos y acciones.
1. Definición estratégica de la marca
Antes de embarcarse en cualquier iniciativa, es vital tener una hoja de ruta clara. Saber a dónde nos dirigimos.
¿Quienes queremos ser? ¿A qué aspiramos?
Esta estrategia debe encapsular la visión, misión y valores intrínsecos de la marca, delineando claramente los objetivos a alcanzar y el camino para lograrlo.
Pista: La coherencia es clave.
Es decir, la marca tiene que ser reconocible en cada interacción. Desde nuestra experiencia, hemos podido comprobar cómo las empresas que mantienen una estrategia coherente tienden a tener un posicionamiento más fuerte en el mercado.
2. Profundo entendimiento del público
Partiendo de la base de que no puedes conectar con tu audiencia si no la comprendes a fondo, no es que sea importante, es que es esencial identificar y entender a tu cliente ideal: sus deseos, necesidades y motivaciones.
Si nos ponemos marketinianos: ¿Quién es tu buyer?
Con este conocimiento, puedes moldear una marca que verdaderamente resuene con ellos. Que se sientan identificados. Que compartan tu opinión y vean en ti una solución a sus necesidades.
Como consultora, hemos observado que las marcas que invierten en conocer a su público logran campañas más efectivas y una mayor lealtad de sus clientes.
Haz encuestas, observa a tu alrededor, ¿qué hace tu competencia?, lee reviews… o simplemente, pregunta.
3. Diseño visual único
La estética de una marca es su carta de presentación. Tu tarjeta de visita.
Más allá de un simple logotipo, los colores, tipografías y estilos visuales deben ser distintivos y evocadores.
No hace falta que contrates a Banksy, pero ten por seguro que las marcas que logran una identidad visual sólida tienen una ventaja competitiva, ya que son fácilmente reconocibles y memorables para el consumidor.
4. Desarrollo de una voz única
La comunicación de una marca va más allá de las palabras; es su tono, su estilo, su esencia.
No lo que dices. Sino cómo lo dices.
Esta voz debe ser coherente en todos los canales y reflejar genuinamente la personalidad de la marca. Si lo haces, lograrás establecer conexiones más profundas y duraderas con tu público.
5. Integridad y cumplimiento
En el mundo de los negocios, tu palabra es tu garantía. Como diría Tony Montana en la película “El precio del poder”: “Todo lo que tengo en esta vida son mis ******* y mi palabra y no los rompo por nadie.”
Cumplir con lo prometido no solo refuerza la confianza del cliente sino que solidifica la percepción de la marca.
Ten por seguro que si mantienes tu palabra y actúas con integridad, obtendrás una reputación más sólida y duradera en el mercado.
6. Priorización de la experiencia del cliente
Cada interacción cuenta.
Cada clic. Cada página que tarda más de la cuenta en cargar.
Desde el proceso de compra hasta el servicio postventa, cada contacto debe ser excepcional. Debes priorizar la experiencia del cliente. Haznos caso, así conseguirás lograr una mayor retención y recomendación, factores clave para el crecimiento sostenido. O si te suena mejor, fidelización.
7. Autenticidad en cada acción
En una era donde la transparencia es valorada, la autenticidad se convierte en un activo invaluable. A nadie le gusta un mentiroso.
Por eso, todas aquellas marcas genuinas y transparentes tienden a generar relaciones más profundas y duraderas con sus clientes. Lo hemos visto. Podemos confirmar que es cierto.
La autenticidad, desde nuestra perspectiva, es un diferenciador clave en el mercado actual.
8. Mentalidad innovadora
Piénsalo. Las marcas líderes están siempre un paso adelante, anticipando tendencias y adaptándose a las cambiantes demandas del mercado.
Crean soluciones a problemas que en muchos casos no sabíamos que teníamos.
La innovación, más que un lujo, es una necesidad para mantenerse relevante y competitivo. Improven dixit.
9. Flexibilidad estratégica
Si bien es crucial tener una estrategia ganadora, también es esencial ser lo suficientemente flexible para adaptarse a circunstancias imprevistas.
Los llamados “problemas del directo”.
Las marcas resilientes son aquellas que pueden navegar por aguas turbulentas y salir fortalecidas.
Desde nuestro punto de vista, la adaptabilidad es una habilidad que, desde nuestra experiencia, distingue a las marcas líderes de las demás.
10. Inversión continua en la marca
Como cualquier otro activo valioso, una marca requiere inversión y cuidado. Como una planta frutal, hay que regarla y cuidarla, si es que queremos aprovecharnos de sus frutos. Si queremos verla crecer.
La inversión en la marca es esencial para su crecimiento y consolidación. Y punto.
Las empresas que invierten de manera estratégica en su marca tienden a ver un retorno de inversión más alto en términos de reconocimiento y lealtad del cliente. Es un hecho.
Invitamos a todas las empresas a reflexionar sobre estos puntos y a tomar acciones decididas hacia la consolidación de una marca que no solo venda, sino que también inspire y perdure en la memoria de su público.