La industria del cartón ondulado es una de las pocas que está mejorando resultados y mantiene volúmenes con respecto a años anteriores. En 2011, la producción española de cartón ondulado creció un 0,53% en volumen, hasta los 4.229 millones de metros cuadrados, lo que mantiene el incremento de volumen conseguido en 2010 y ha supuesto un consumo de papel en onduladora de 2,5 millones de toneladas durante 2011.
La industria de cartón ondulado en España está formada en su mayoría por pequeñas y medianas empresas familiares, distribuidas por todo el territorio nacional, pero con especial concentración en la zona Noreste, Este y Centro de la península. Cataluña, Comunidad Valenciana y Madrid concentran el 69% de la industria cartonera española.
Nuestro país es tanto el cuarto productor de cartón ondulado (por detrás de Alemania, Francia e Italia) y el cuarto consumidor del mismo en la Unión Europea, aunque es el tercer país que más plantas fabricantes posee, alcanzando las 97.
En España, cerca del 54% del consumo de papel y cartón es demandado por el sector de la agricultura, alimentación y bebidas. A diferencia de la tendencia europea, en la que la mayor demanda se produce en el sector alimentación, en España esta demanda se encuentra liderada por el sector de la agricultura.
La facturación global del sector de cartón ondulado se incrementó un 8,4%, alcanzando los 4.030 millones de euros. En esta cifra está incluida la facturación directa, que alcanzó los 2.360 millones de euros, y la indirecta, que se estima en 1.670 millones de euros.
Se trata de un sector que depende mucho del comportamiento del consumo de forma que, ante perspectivas negativas sobre el consumo nacional en España, la demanda puede verse reducida, aunque las empresas cartoneras busquen cobijo en sectores que se muestran más estables como la alimentación. Ante este escenario, iniciativas para mejorar la competitividad y reducir los costes operativos para compensar una posible caída de la actividad y/o de los márgenes, son necesarias.
Pero, ¿dónde podemos actuar para reducir estos costes? Algunas palancas que nos hemos encontrado asesorando a empresas del sector pueden ser:
- Coste del papel: En el papel las empresas tienen muy pocas alternativas para poder actuar sobre su precio. Prácticamente sólo podemos tener algo de control buscando proveedores extranjeros para el papel kraft. Según el volumen y situación de cada compañía, se pueden buscar alternativas de otro tipo de papel en el extranjero pero asumiendo algo más de riesgo de suministro.
- Mermas: El aspecto relacionado con el papel sobre el que sí que tenemos más incidencia es el nivel de las mermas que se generan durante las diferentes fases del proceso. Se debe medir la merma en las diferentes secciones y lanzar medidas claras para optimizarla dentro de cada parte del proceso y reducirla metro a metro.
- Productividad: Es recomendable medirla con el OEE (Eficiencia Global del proceso), dividida en la disponibilidad de la máquina, la eficiencia de la misma y la calidad de metros buenos que se consiguen. Hay que hacer hincapié en reducir los tiempos de cambio, mejorar la optimización de la planificación, analizar las velocidades objetivo por cada tipo de producto, hacer foco en el mantenimiento para reducir al máximo las microparadas y las paradas no programadas y controlar las mermas como comentábamos anteriormente.
- Mano de obra: Las mejoras de productividad combinadas con un incremento de la polivalencia en los diferentes puestos puede llevar a una reducción del coste de la mano de obra, siempre que no se haya podido llenar ese excedente de producción con venta nueva. En cualquier caso, debería bajar el coste relativo de mano de obra sobre la facturación.
- Logística: Una de las prácticas habituales del sector es repartir el gasto del transporte medio de la empresa entre todos sus clientes y no tener en cuenta el gasto de transporte real por cliente, aspecto importante en el sistema de costes. Por otro lado, uno de los objetivos fundamentales es optimizar la carga de camiones y las rutas asignadas, para reducir los costes e intentar incrementar el nivel de servicio que se da a los clientes.
Otros aspectos importantes son la gestión del stock tanto de producto terminado como de materia prima, que debe depender del director de operaciones (aunque no es práctica habitual en el sector) para poder generar tesorería y el retorno de los palés, lo cual requiere una buena gestión desde el departamento de logística y comercial.
Compras: Nuestra experiencia pone de manifiesto que una gestión de compras muy descentralizada impide una correcta administración de las mismas. Las compras de este tipo de empresas pueden representar entre un 65% y un 75% de la cifra de ventas, por lo tanto, deberíamos tener un equipo completamente orientado a la búsqueda y negociación con proveedores alternativos y actuales para reducir los costes, mejorar el nivel de servicio, mejorar la calidad de los productos, mejorar las condiciones de pago…
No debemos tratar a todos los proveedores ni familias igual, sino que hay que diferenciarlos por la importancia de ese producto para la empresa y el riesgo de suministro que se asume con estas familias.
Una correcta gestión de todos estos aspectos operativos del negocio puede dar cierta viabilidad a corto plazo (aspecto que debería ser fundamental en los próximos dos años) pero al mismo tiempo debemos pensar en construir empresas sólidas a largo plazo que, en algunos de los casos, se conviertan en empresas líderes en el sector con un crecimiento sostenido.
Nuestra propuesta estratégica sobre la que asentar una compañía líder en este sector pasaría por cubrir los siguientes objetivos:
- Ganar volumen: En un sector donde la diferenciación de producto, en general, es tan escasa entre unos competidores y otros, ganar volumen es fundamental para conseguir economías de escala y ser más competitivos en costes. Además, actualmente en España existen demasiadas empresas en el mercado que tenderán a concentrarse en el futuro. Las más preparadas y organizadas en el pasado podrán alcanzar este volumen mediante adquisiciones de empresas en áreas geográficas complementarias a su actividad actual. Aquellas que no tengan cierta disponibilidad de los fondos necesarios para crecer mediante adquisiciones, deberán acudir a los mercados de capitales o conseguir este volumen con una excelente gestión empresarial, materializada en una excelente gestión comercial y en una excelente gestión operacional.
- Ser diferente: La diferenciación de producto es muy escasa en el sector, por lo tanto todavía debemos poner más énfasis en conocer a nuestros clientes y competidores para poder ofrecer el paquete de servicios demandados por estos y que nos diferencie de nuestra competencia (departamento técnico, nivel de servicio, producto distinto, etcétera). Debemos orientar esta diferenciación para ayudar a nuestros clientes a reducir el coste de las cajas que están consumiendo con nuestros competidores con propuestas de diseño ajustadas a sus necesidades. Por otro lado, el desarrollo de nuevas aplicaciones de los envases de papel va a dotar de un liderazgo en el sector a las empresas que lo implanten que les permitirá mejorar la rentabilidad de su negocio.
- Optimizar los costes: Es necesario buscar un buen sistema de planificación y optimización de medidas en la onduladora y de reducción de las mermas durante todo el proceso productivo. Las empresas están muy focalizadas en controlar la optimización de las bobinas y el trim (merma que se produce en la onduladura) y pierden el control del resto de la merma del proceso productivo. Por otro lado, debemos optimizar la eficiencia de la planta al máximo por lo que hay que centrar los esfuerzos en alcanzar las velocidades máximas de máquina por artículo, reducir al máximo los tiempos de cambio, optimizar los tamaños de lote, gestionar activamente el reciclaje de tintas y focalizar un departamento de la empresa en la negociación con los proveedores de todas las materias primas y los servicios de la empresa. Hay que encontrar oportunidades de ahorro en todas las partidas (tintas, palés, films, transportes,…).
- Saturar las instalaciones: Antes de continuar con inversiones es necesario analizar correctamente cual es la capacidad objetivo actual de la planta por sección e intentar saturarla completamente. La rentabilidad a corto plazo de las empresas del cartón está en la saturación máxima de sus instalaciones, por lo que este debe ser un objetivo fundamental de trabajo. Después de analizar en detalle las empresas es habitual encontrar líneas de fabricación muy saturadas y otras con excesos de capacidad de más del 25%, lo que provoca una pérdida de rentabilidad muy alta. También es habitual encontrar mucho foco en las organizaciones en saturar completamente la onduladora (aspecto que es correcto) pero con mucho menos foco en la saturación de las secciones de manipulado.
- Organizarse comercialmente: Ya sabemos que el mercado nacional se está reduciendo poco a poco y está penalizando sustancialmente las cuentas de resultados (aunque el papel ha dado al sector un poco de respiro en este 2012), por lo que es fundamental cómo se gestione y focalice a la fuerza comercial para poder anticiparse a posibles fugas de clientes, así como en la captación de nuevos clientes en aquellos sectores y clientes que sean más interesantes para la compañía. Conocer la rentabilidad de cada uno de los clientes y de los productos es otro aspecto fundamental para focalizar los esfuerzos, que junto con el conocimiento de las necesidades para saturar completamente la planta permite conseguir una mayor rentabilidad.
Conclusions
Se aproximan tiempos convulsos para el sector y sólo aquellas empresas que se preparen para afrontarlos serán capaces de sobrevivir a los mismos. El camino hacia la concentración va a seguir presente en el sector pero sólo los actores con un valor interesante serán susceptibles de entrar en estos procesos y sólo los que hayan hecho los deberes en el pasado tendrán opción a esta vía de crecimiento.
Independientemente de este aspecto, la excelencia en la gestión va a ser fundamental y la optimización máxima de las operaciones y una gran gestión comercial es la fórmula perfecta para maximizar los beneficios de las empresas. Si a esta fórmula de éxito le podemos añadir un poco de innovación en producto, convertiremos a nuestra empresa en uno de los principales actores en su zona o mercado de influencia.